Versos para Patroclo

Siempre me decían: "Mantén cerca un bolígrafo y un papel para esos versos que vuelan rápidos y que con el sueño nunca vuelven". Hoy ya no me hace falta seguir ese consejo. Ellos surgen de mí y mueren en mí y he decidido ser inmortal. La inmortalidad de Patroclo. Las sombras y esos labios derritiéndose en mi boca sedienta. Es la sed, el desierto, este frío terrible, este sudor que me evapora. Esta sed que sólo calma el abrazo de las piernas al abrirse para poder beber, beber tal y cómo lo hizo Joe Williams. Tal y como Robert Plant nos descubrió al ahogarse nada más grabar su primera canción. Es todo cuestión de canciones, murmullos e hierros candentes que nos dejan ciegos, somos antropomorfos del sexo, con sólo cuatro sentidos para lamer el sudor y el whisky de las vulvas. Pero sí, es verdad que a veces un hielo ayuda a emborracharte mejor, a alcanzar un final más acorde al violonchelo que te regaló tu madre al nacer. Al final, una noche se puede resumir en el alcohol destilado por tu cuerpo junto con las canciones que cantas y que no son tuyas, sino de tus ancestros más alejados. La música es la voz de esos muertos que nunca conociste y se resisten, como Patroclo, a hundirse en la oscuridad absoluta hasta que nos hayan consumido en su venganza. Al igual que Joe Williams, sin papeles para cambiar de rumbo sabiendo que los barcos no naufragan, sólo mueren de sed.

Fiesta Presentación del Número 31 del Coloquio de los Perros

Mamen Piqueras, Antonio Marín Albalate, Ángel Paniagua, Joaquín Piqueras, Antonio Gómez Ribelles, Natalia Carbajosa, Diego Sánchez Aguilar, Alberto Soler, Noelia Illán Conesa, Natxo Vidal Guardiola y el que os escribe estaremos en la presentación del Número 31 del Coloquio de los Perros, la revista digital con más talento de este país.
Será en el Ficciones Café, en Cartagena, el próximo Viernes a partir de las 21:30h.
Otra cita a la que no podéis faltar...

Gracias por Ningún Lugar

Y qué os voy a contar y cómo os agradezco la noche de ayer. Gracias a Ficciones Café, gracias a la pintura y gracias a la lucha mexicana.
Besos y Salud.

Juan de Dios García y Vicente Velasco

Fiesta Presentación del Poemario Ningún Lugar de Vicente Velasco

Os vuelvo a condenar y convocar para otro sarao poético en el que volveré a presentar mi primer poemario Ningún Lugar (Ed. Diputación de Jaén, 2012).
Será en el Ficciones Café  de Cartagena, acompañado de mi gran amigo Juan de Dios García y bajo la el calor del Diván.
No podéis faltar porque después, si os lo cuentan, os arrepentiréis por todo lo que os resta de triste existencia.

Gracias por la noche

Gracias a todos los que asistísteis a mi recital en la Cafetería Zalacaín de Murcia.
No hace falta que os nombre. Aún me llueven vuestras sonrisas.
Gracias de nuevo.

Vicente Velasco, Héctor Castilla y Antonio Marín Albalate
Vicente Velasco  Montoya
Alberto Caride y Vicente Velasco Montoya

Tanka en una botella

El oleaje
Que anida en tu cabello
Es la tormenta
Que calma mi insomnio
Y unta con sal la herida.

Vicente Velasco recita en "Los Lunes Literarios" del Zalacaín

Os convoco a todos, conocidos y ajenos, a mi recital este próximo Lunes, 15 de Octubre, en el Café Zalacaín de Murcia dentro del Ciclo "Los Lunes Literarios" organizado por el Colectivo Iletrados.
A partir de las 22:00h podréis asistir a la presentación de mi primer poemario y de otros tantos poemas que guardo para todos vosotros, siempre acompañados de una buena cerveza.
Os espero en la ciudad del Segura.

Tanka Ácrata

Rostro por luna
Caída de melena.
Arrodíllate
Para leer tu boca
Y compartir tu idioma.

Tres mil termitas

Tendría muchos nombres para describirte
Mercader barato que robaste mi trabajo.
Podría adornarte de severos adjetivos
Cuando tu ignorancia desconoce el final
De estos últimos. Podría no nombrarte
Y sería, mancebo del cuarzo, lo más fácil,
Lo más sereno para diferenciar tu ignominia
De mis apellidos que te escupen, estiércol
Paupérrimo errante que te reproduces
Para desprecio dé todos los que te rodean.
Tendría tres mil motivos como monedas
Cayendo al suelo y conformando el canto
De tu vil ofensa. Tres mil monedas, tú
Que vendías cerdos al mejor postor, vacío
Hambriento de la farsa que representas.
Tu olor me ahoga, borrico,
Tu olor a basura rescatada
Con su rostro de reciclaje.
Marrano fuiste y hoy te maldigo
Con tres mil termitas que consuman
Aquello que no supiste agradecer, basura,
Perra puerca del dinero. Tres mil
Termitas que te hundan por siempre
En la negrura del vientre que por desdicha
Trajo al mundo a semejante bastardo.